Había una vez dos tigres nadando en el agua. Se voltearon porque escucharon ruidos. Había personas viéndolos nadar. Los señores y los niños observaban la conducta de los tigres en el agua.
Les sacaban fotos y tiraban comida para ellos.
Los tigres también se quedaban mirando, pero a las personas. Porque además de comida les tiraban otras cosas. Ellos se molestaban.
Y les hacían así: ¡GRUUU!!!!
Esas personas se fueron asustadas, entonces los tigres tranquilos salieron del agua.
Gianella Sheyla 4ºD T.T.
Hola chicos de primero:
Los quiero felicitar por la hermosa imagen de los tigres que publicaron en el blog de la escuela. Parece que a esos tigres les gusta el agua igual que a mí. Me hace acordar cuando yo nado en la pileta todos los veranos. Espero que hayan disfrutado el paseo por Temaiken, Yo no lo conozco, pero sí fui al zoologico. Vi un montón de animales, ese día no estaban los tigres.
Igual fue un día muy bonito.
Les mando muchos cariños.
Mariana de 5to. C turno tarde.
Cuando fuimos a Temaikén vimos a estos tigres pero no en el agua, sino descansando plácidamente bajo la sombra de los árboles de su hábitat. Nos contaron que es una especie en serio peligro de extinción, por eso la reproducción tiene un rol fundamental.Los cachorros nacieron en el inicio de este año(fueron tres,un macho y dos hembras) y pesaron al nacer cerca de dos kilos. La mamá se llama Maika, una tigresa naranja de 7 años proveniente de México y el papá se llama Sandokán, un tigre blanco de 10 años. Realmente nos encantó verlos, así que compartimos esta información con todos los lectores del blog.
Chicos de 6º C y D y su seño Mónica
Cuento corto.
Mundo de contrastes. Blancos-Negros. Grandes-Pequeños. Violentos-Tolerantes.En mi mundo la mirada es junto con los mios. Hacia el mismo lado. Orientada hacia la vida, la búsqueda de la supervivencia de a dos.De a dos, no importa el contraste. Ella blanca, yo no. Ella es vida, yo también. Ella lleva una vida, una vida que inventamos juntos. Y que en esta selva trataremos de vivir lo mejor posible.Sin miedos. Sin tiempos. Pero con la mirada en el camino.
Andrea.
Muestra patente de que las apariencias engañan. Debemos mantener la imagen que el hombre construyó para nosotros, sin embargo si nos observan detenidamente, si nos dieran algún momento de vuestro tiempo, podrían ver que también nosotros tenemos miedo, que somos frágiles, que nos escondemos debajo de nuestro codiciado pelaje y que somos buscados por ustedes como trofeos que van a demostrar en alguna reunión de holgazanes cazadores la superioridad de uno hacia el otro.
Huyan - nos dijo mi madre - hagan lo posible por salvarse ustedes, no miren hacia atrás.
Pero todos no somos iguales, él comenzó a extrañarla, a dejarse estar, a no atreverse a cruzar el río…miramos hacia atrás, no pudimos resistirnos. Èl había decidido quedarse a salvarla, ella necesitaría ayuda en cualquier momento…
Creo que hicimos lo correcto, nos salvamos, de ella no sabemos, tampoco de nuestro hermano, pero cumplimos con su pedido, seguramente estará orgullosa de saber que sus hijos la recordarán una valiente, como muchas veces los humanos no saben ser.
Huyan - nos dijo mi madre - hagan lo posible por salvarse ustedes, no miren hacia atrás.
Pero todos no somos iguales, él comenzó a extrañarla, a dejarse estar, a no atreverse a cruzar el río…miramos hacia atrás, no pudimos resistirnos. Èl había decidido quedarse a salvarla, ella necesitaría ayuda en cualquier momento…
Creo que hicimos lo correcto, nos salvamos, de ella no sabemos, tampoco de nuestro hermano, pero cumplimos con su pedido, seguramente estará orgullosa de saber que sus hijos la recordarán una valiente, como muchas veces los humanos no saben ser.
Rosana Colombo.
Los animales son seres que nos sorprenden. Su forma de moverse, sus miradas, su instinto que los lleva a conseguir lo que desean. (A veces deberíamos aprender más de ellos).
Estos dos en el agua parecen pacíficos, serenos, dispuestos a relajarse. El agua los llama, les manda mensajes de pureza desde el interior. Quizás en el agua pueden sentirse livianos, capaces de moverse de otra forma, con otra soltura. Deberíamos aprender más de los animales dentro del agua.
Nada parece molestarlos, la quietud de sus corazones se entrelaza con su pelaje blanco radiante. Están dispuestos a dejarse llevar por la corriente de esa agua viva. Quizas mucho de los que nos falta en esta época del año, no?
Miran, se miran, observan, se reflejan en el otro. Van juntos, no se separan, se "tiran al agua". Se contagian del agua, y se vuelven a encontrar. Cuanto deberíamos aprender de los animales dentro del agua...
María Agresti.
2 comentarios:
Me gusto mucho, Gianella. A veces las personas no son muy correctas y deben aprender muchas cosas para poder vivir mejor.
Te felicito!!!!
que lindo como escriben!!!!!!!!
me gustaron todos!!!!!!!!
felicitaciones!
Andrea de inglés
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