Nuestras cabañas. Hoy escriben: Guillermo y Gabriela.

Cabaña pirámide.


Había una vez una cabaña muy linda que estaba abandonada desde que se murió el dueño y quedó su mujer. Ella no se quiso hacer cargo ni de la cabaña ni de los impuestos que tenía que pagar.


Hasta que un día encontró tres cerditos y dicidió llevárselos a su casa y protegerlos de las enfermedades que pudieran agarrarse en la calle. Más tarde decidió abrir la cabaña y empezar a juntar los animalitos que encontraba en la calle. Para limpiarlos, cuidarlos y llevarlos a la cabaña junto con los tres cerditos.


Finalmente todos los animales fueron bien cuidados y anotados en un concurso de belleza.
Adrián G. -


Cabañas de 5 semillas.


Un día encontré montañas de semillas y me pregunté:_de qué serán estas hermosas semillas? Me gustaría agarrar una. Y entonces tomé 5
para plantarlas y después llegué a mi casa.
Le dije a mi mamá que encontré esas semillas maravillosas.
Ella me dijo:_Vamos a plantarlas.
Y fuimos.
Al día siguiente cuando me levanté y en el lugar de las semillas había cabañas.
Todos los días, los chicos, iban a verlas.
Me gustaban. Pero una de ellas me atraía más que las otras. Era la de un árbol. Esa es mi preferida.

Gabriela.